ARTES SUNTUARIAS PARA CULTOS INTERNOS
Entre las artes suntuarias para el culto interno se pueden señalar algunas casullas bordadas en oro, la custodia para la exposición del Santísimo Sacramento, un crucificado de marfil sobre cruz de madera noble y cantoneras de plata, copones y cálices, destacando de entre ellos el realizado en plata por José Alexandre Ezquerra en 1770. Su decoración se compone a base de rocallas. En la base posee tres cartelas con los escudos de la hermandad del Dulce Nombre de Jesús, el de los dominicos y una corona de espinas atravesada por un clavo. En la zona de la copa se representan algunos de los atributos de la Pasión de Jesús: escalera, lanza, tenazas, martillo, columna y flagelos. El cáliz lleva en su interior la siguiente leyenda: “ESTE CALIZ ES DELA CAPILLA DEL NIÑO JESVS DEL REAL COMO DE SN PABLO AÑO 1770”.
Otro elemento a señalar es la candelería de madera tallada y dorada que desde la mitad del siglo XIX realiza la hermandad. Entre ellos destacan los 12 blandones realizados por el tallista José Vicente Hernández, a quien se le abonaron diversos pagos por este concepto desde 1856 a 1859.
Igualmente debemos de señalar el antiguo dosel para el altar de quinario que fue diseñado por el profesor Liaroain, tallado por Joaquín Ojeda y dorado por Manuel Gómez, todo ello entre 1852 y 1853. Con algunas de las innumerables piezas que formaban el dosel, se ha realizado una composición a modo de altar para la imagen de Jesús Resucitado, quedando el resto en la sala capitular de la hermandad.